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A quien le importara, cansado en un camino sin rumbo fijo, ni alguno por fijar, queriendo ir mas allá de las tinieblas donde una nueva aurora allá para sosegar mi desazon, alguna veces recorro mi sinceridad y encuentro frió con un poco de euforia y me miro un poco ajenado, con una fuerte emoción que a veces al aparentar sonreír se diluye como un papel fotográfico puesto en agua.

Tantas veces acorralado y siendo esclavo de las necesidades no necesarias, muchas veces queriendo arrancar de imaginaciones llamadas tentaciones que quieren ser reales y afectan tu esencia, tantas injusticias volcadas en un egoísmo de la propia sociedad.
Idealmente con la necesidad consumida por el consumismo y la exactitud volcada un tanto a la predicción, siendo vulnerable y poco injusto narro una historia que nada mas hace testimoniar la capacidad de contener las propias realidades que escondemos bajo las tinieblas de una sonrisa.

¿Por que aparentar?, porque escapar de la humildad, de la honestidad, ¿que pretendes?, ¿que quieres?.
Dulces valores y ricos manifiestos, lo propio es sincero y lo ajeno deshonesto, la grandeza se consigue abandonandose a si mismo, el ejemplo mas grande es el de nuestro Señor, que siendo Dios dio su vida por nuestros pecados.

Libertad, suelo escuchar mucho esa palabra, libre queremos ser, pero creo que lo primero que ahí que hacer es dejar de lados nuestros propios limites y dejar de ser esclavos de nuestras mismas cosas, ser libres y eficientes, atesorar nuestra vida con una convicción única, dejar de lado egoísmos, angustias y florecer, acaparar las necesidades materiales en fortalezas de las necesidades espirituales.

Nunca o muy pocas veces recuerdas que eres un milagro, pocas veces te valoras, pocas veces te amas a ti mismo antes de amar a otro, eres tu lo esencial y si alguien no te ama es porque no ha encontrado el valor en ti, muchas veces lo olvidamos, pero lo esencial es la persona, eso es lo que se queda para el resto de la vida, el tiempo pasará la belleza acabará en un abrir y cerrar de ojos, pero las personas quedan y lo que se lleva en el corazón se mantiene por siempre.

Compartamos aquello que es muy hermoso, nuestra vida.