viernes, 24 de diciembre de 2010


Un 24 de Diciembre salí enojado de mi casa, fui a parar a mi parroquia habitual, enfuscado miraba a la Virgen María, cuando en la escalera que lleva a la gruta se encontraba un mendigo que llamo mi atención, le fui hablar con cautela ya que no sabia como reaccionaria ante mi presencia. El con una voz pausada, agotada me miro a la cara y me tendió su mano pidiendo algo de limosna, me senté a su lado le di la mano y pregunte su nombre, luego le pregunte donde pasaría está navidad, me respondió que en el hogar, perdón le dije ¿usted tiene casa? y él me contó su historia que hasta el día de hoy recuerdo. Su hija era su gran orgullo, era secretaria, su mujer lo abandono por otro hombre siendo la niña una pequeña, crio a su hija, le dio estudios y todo lo que se refiere a valores. También dijo que él no era viejo, pero una trombosis lo dejo inhabilitado para trabajar, me dio unos consejos tan sabios, pero más que eso ese día encontré a Cristo en la calle, pidiendo amor, entregando amor, ese amigo se robo mi corazón. Yo reconozco que soy una persona que muchas veces se enfusca, pero ese hombre me enseño que en el momento menos esperado puede ser tú gran oportunidad.

Cada día que veo a mi amigo Juan Carlos le pregunto ¿se acuerda de mi nombre?, cuando sonríe y me dice como no don Marcelo, pero le pregunte el domingo y acertó ¡Felipe! Me dijo.

Muchos quisiéramos una oportunidad con Cristo para decirle cuanto lo amamos, cuando Cristo muchas veces deambula por nuestras calles buscando amor, teniendo hambre, pero nuestras cosas puntuales nos limitan a ver más allá de nuestras narices.

Feliz navidad, busca en lo sencillo tú felicidad y recuerda que más que dar un buen regalo material, una simple sonrisa puede alegrar un día.

miércoles, 22 de diciembre de 2010


Cuando se acerca está fecha tan importante me pongo a pensar en lo bueno y lo malo logrado este año, lo lógico sería contar cada fracaso, cada tristeza y aprender de ellas, la verdad es un tanto difícil aprender de un error, como también lo es aprender de una victoria, en un sentido comienzo a pensar en mi, se me cubren los ojos de lagrimas, a la vez siento alegría, esa alegría inmensa por vivir, por tener la oportunidad de mirar el cielo, la luz y a mi mismo en un espejo, la verdad es que los años pasan, mi virtud es tan vulnerable, la adicción al fútbol cada vez incrementa, no poder jugar como antes debería ser una pena que a la vez la veo cubierta por el amor, nunca he querido despojarme de lo más hermoso que me ha tocado vivir, paso día a día por esfuerzos notables, enfrentar vaya que es difícil, pero la fuerza, mi voluntad me dicen desde mi interior ¡Vamos mierda! La vida continua siendo ese mismo pasaje que recuerdo haber visto cuando Jesús me dio la oportunidad de respirar la segunda vez.

El intento más noble de felicidad es darse así mismo, cumplir tus metas ligadas a valorar cada detalle, pensar que todo es posible si tú actitud es la necesaria para vencer, cada estaca en el camino no es más que una ayuda que te permite pensar, reflexionar y ver si estás actuando de la forma correcta.

Nada es imposible ni ser feliz al término de un año, tienes vida, lo tienes todo.

Valora cada detalle mínimo, lo menor muchas veces puede salvar tú vida llegando a ser lo más grande.

viernes, 3 de diciembre de 2010


Cada vez que uno se encuentra desanimado tira la esponja y no encuentra solución alguna para nada, la vida no significa nada, respirar es un simplicidad y costumbre, caminas sin pensar que muchos no tienen la oportunidad de desplazarse solos a un lugar, yo en realidad digo, Solo vivir es un milagro amigo, las dificultades siempre estarán, pero tener una consecuencia tan grave cómo vivir sin la esperanza de realizar lo común, caminar sin la certeza de dar un paso seguro, correr sin saber si es un sueño avanzar o una realidad ya que una limitación te impide enfrentar lo que deseas, eso es terrible, luchar contra eso es ganarle a la vida.

Muy atento escucho a una niña con limitaciones decir “tú te creas tus propios limites, solo tú vives cómo quieres”, es tan cierto, si tú decides ser feliz lo lograrás, te costara mucho, pero en la vida todo cuesta, hasta dar un paso, mover un dedo, solo tú tienes la opción de decidir.

Esa formula que plantea Leo Alcalá C+R=E, es tremendamente efectiva, primero la circunstancia, teniendo en cuenta que puede ser todo lo que este en el exterior, lo necesario es tener una respuesta positiva para convertir en realidad tus metas, realizando esto adecuadamente te llevará al éxito.

No busques limites, busca una identidad para triunfar siendo mejor persona llena de valores.